OPINIÓN | En España hace falta el endurecimiento de las penas, "para no ser la burla de algunos", al igual que disminuir la edad de responsabilidad penal de los menores (adaptándonos a la realidad social), como si son españoles o extranjeros, incluso inmigrantes con documentación en regla o permiso de residencia.
El problema de la delincuencia no es la nacionalidad u origen de una persona, principalmente es la marginalidad en que han vivido y en la que han desarrollado su vida; sin oportunidades, segregados, excluidos, apartados, discriminados.
Añadir que cuando un extranjero comete un delito se convierte en caso mediático, lo que lleva a la estigmatización y generalización de delitos como: violaciones grupales, violencia de género, robos o asesinatos. (De esa marginalidad sacamos a los políticos y funcionarios corruptos, que son delincuentes de cuello blanco).
Sin justificar el delito; hay permisos de residencia que no autorizan trabajar, hay personas que viven en la calle, no tienen hogar, a otros los discriminan por ser extranjeros; negros, magrebíes, latinos o mujeres, no tienen núcleos familiares que les acojan, amparen o ayuden… esa discriminación más el abandono estatal y social, (y otras causas) llevan a la delincuencia.
Aclarar; Inmigrante no es sinónimo de delincuencia, es totalmente injusto, reprochable y de gran bajeza criminalizar a una parte de la población extranjera e inmigrante, al pretender achacar el problema de la delincuencia a éstos, bien sea que estén o no, en situación irregular (ósea indocumentados o sin permiso de residencia), esto no significa que sean delincuentes.
Pero es más fácil para una parte de españoles y partidos políticos de ultraderecha, irresponsables, echar leña al fuego con discursos xenófobos, enfocar y culpar de una problemática social a la inmigración, metiendo a todos en el mismo saco.
Buscan cabezas de turco o chivos expiatorios para descargar el problema y la suciedad. Es totalmente inaceptable y se falta a la verdad, criminalizando a los inmigrantes.
Si, algunos extranjeros delinquen de forma individual o en grupos –mafias-. Estás personas ingresan a España (o a cualquier país) como turistas, con visados o permisos; pero son extranjeros delincuentes, "esos ya tienen la mala semilla dentro y saben a lo que vienen", incluso desde sus países de origen son de profesión delincuentes, por supuesto que también hay delincuentes y mafias españolas (que de todo hay en la viña del señor), y porque estos delincuentes y mafias sean de nacionalidad española, no indica que delincan menos o el delito sea diferente o menos delito. (El delito continuará siendo una conducta típica, antijurídica y culpable).
Un inmigrante es una persona que decide reubicarse, hacer su vida o echar raíces, en otro país diferente al suyo, con documentación en regla o en trámite, y sometidos al imperio de la ley del país anfitrión o el país que los acoge.
España un país que envejece y con un bajo índice de natalidad:
ELPAIS.COM: INMIGRANTES PARA SALVAR LA ESPAÑA QUE SE MUERE
La inseguridad en las calles, especialmente en ciudades llamativas por posibilidades de empleo, turismo, ayudas y subvenciones, genera el temor de caer en manos de delincuentes.
No mencionaré a MENAS (menores extranjeros no acompañados).
Hablaré de extranjeros e inmigrantes mayores de edad, sin criminalizarlos, ni etiquetarlos como problema de delincuencia, no con el ánimo de discriminar o marginar grupos, pero es necesario tomar medidas contundentes contra la delincuencia.
Con los españoles no podemos hacer nada, aparte de endurecer el código penal y obligar a que cumplan las penas impuestas, es inaceptable y vergonzoso que en una sola persona tenga, denuncias, procesos y sentencias... y siga en las calles, burlándose de la administración de justicia.
Extranjeros o inmigrantes (menores o mayores de edad), deben cumplir la pena en España y después ser expulsados a sus respectivos países.
Actualmente el código penal español: impone y obliga al juez a expulsar a extranjeros que son condenados.
La reforma del Código Penal (que entró en vigor el 1 de julio de 2015), modificó la sustitución de las penas privativas de libertad por la expulsión, cuando el delito ha sido cometido por un extranjero y han sido condenados a penas superiores a un año. (Hablamos de delitos "penales", no infracciones o multas).
A quienes vociferan sin conocimiento: que los extranjeros que cometen delitos sean “echados” inmediatamente de España. Bueno; haré un esfuerzo por comprender su ignorancia y explicaré, 3 puntos:
Y lo más importante, entender que debe haber sentencia en firme para que haya expulsión.
También hay excepciones para evitar la expulsión: El Arraigo. Cuando quien paga la pena tiene hijos o familia que dependan de él, negocios o vínculos laborales, propiedades en España; el juez tiene que valorar y considerar estos aspectos.